26 sept 2006

Tariq e as identidades
Afonso Monxardín conta hoxe, na súa columna semanal, as diferenzas entre Antonio Elorza e Tariq Ramadán sobre o debate do Islam, nos Encontros de Mondariz que organiza a Fundación Casares. Eu non puiden estar alí (ben que me pesou!) e gustaríame asistir en directo a esa confrontación dialéctica (aínda que, en principio, concordo máis cos escritos de Elorza). Con todo, transcribo aquí o final do artigo do amigo Afonso sobre as identidades, que me parece de moito interese para os lectores/as destas Uvas.

Porén, creo que maioritariamente nos seduciu a personalidade de Tariq. Con énfase, claridade, ollando de fronte, con firmeza e coa elegancia de que careceu o articulista de El País cando falou de Tariq ás súas costas, explicounos a súa dobre palabra en función do receptor para que chegase a mesma mensaxe en defensa da mesma idea reformista. Incluso nos contou unha simpática anéctoda sobre as identidades. Cando lle preguntan se el é antes musulmán ou europeo, contesta cunha parábola. Un poeta vexetariano, que é antes, poeta ou vexetariano? A resposta é obvia. Será poeta cando o consideramos en comparación con narradores e vexetariano cando falemos de preferencias gastronómicas, pero son cousas de esferas distintas entre as que non se ten por que escoller.
Así, a identidade da persoa, este tótem da liberdade do individuo occidental, está composta doutros moitos trazos identitarios propios, como poeta, vexetariano, loiro, europeo, filatélico, laico, madrugador, angloparlante e do Celta de Vigo. Por exemplo.
Se cadra é así. E por se fose certa esta cousa tan bonita, creo que occidente debería apoiar estas visións reformistas do Islam, porque Tariq é un deles e, creo, tamén un de nós. El calquera caso a política de só pau dos últimos anos, moito resultado non leva dado en favor dun mundo máis seguro e en paz. Hai que explorar outras vías. Pero rápido, rápido.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

O señor Monxardín, polo visto, deixouse seducir pola boa presencia e as boas artes de Tariq Ramadán, até o punto de consideralo a "solución".

Eu, particularmente, sería algo máis cauto no entusiasmo.

Ramadán é moi cuestionado por moitos motivos. E, sinceramente, eu non dispoño aínda de todos os elementos necesarios para facerme unha visión completa.

A título informativo (e pídolle perdón ao amigo Valcárcel pola súa extensión) colgo a continuación unha información crítica que coido de interese para os lectores:

¿Reformista o salafi?
Siguiendo a Fourest, Guindy explica que "Tariq Ramadan y sus partidarios están liderando una campaña para presentarlo como un 'reformista', como el 'Martin Luther del Islam', o como un pensador que está introduciendo cambios en el Islam para apoyar el racionalismo, el modernismo, y hasta el secularismo. [Ramadan] no duda en indicar que es un emisario divino, mencionando que 'según la tradición profética, cada 100 años vendrá un reformador a renovar el entendimiento religioso de los musulmanes'".
Guindy agrega que Ramadan pertenece a la corriente salafi, a la cual Qutb, Al-Mawdudi y Al-Bana pertenecen, y dice que "Ramadan no duda en expresar su odio por la corriente de reforma liberal. Él está opuesto a que [la noción del] Islam se desarrolle en una fe individualista que no se imponga a si misma en otros... Él condena a aquéllos que están opuestos a la manera única de vestimenta que distingue a los musulmanes de otros (tal como el velo), describiéndolos como traidores que se han rendido al pensamiento occidental. También condena a aquellos que piensan que el Corán y el Sunna no pueden ser fuente de autoridad para la conducta personal y cultural contemporánea, y representa a los musulmanes liberales que entienden el liberalismo en el sentido occidental, [e.d. como una perspectiva que] fomenta el racionalismo y la individualidad personal, tal como 'musulmanes sin el Islam'...
"En una entrevista de noviembre del 2003 con radio [Beur FM] en idioma árabe de París, Tariq Ramadan dijo: 'Existe una corriente racionalista reformista, y existe una corriente salafi que está intentando permanecer fiel a las bases [de la religión]. Yo pertenezco a la [última] corriente. Es decir, existen varios principios que yo considero básicos, y que, como musulmán, no puedo negar'... Sin embargo, durante una conferencia de la UNESCO en febrero del 2004, cuando [el autor y clérigo francés musulmán] Ghaleb bin Sheikh, que pertenece a la corriente liberal reformista la atacó, dijo: 'No soy salafi. Un salafi es alguien que se aferra a la palabra escrita [harfi] y yo no soy así.' Ghaleb bin Sheikh cree que [los conceptos como] 'shura' ['concejo asesor'] e 'ijma' ['consenso religioso'] deberían ser usados como medios para reinterpretar [las fuentes religiosas], y, cuando sea necesario, como un medio de abolir algunos de los versos que van en contra de la dignidad humana tal como se entienden hoy. Tariq Ramadan se opone totalmente a esta tendencia, y lo ve como traición y como apostasía en el Islam [riddah]. Él enfatiza que el texto es eterno, pero su interpretación es relativa".
Membresía en la Hermandad Musulmana
"Tariq [Ramadan] a veces dice que no es 'miembro' de la Hermandad Musulmana, como si uno debiera tener un carnet de membresía para estar asociado a la organización. Por otro lado, durante la visita al Cairo en [Ramadan] 1998, el guía espiritual de la Hermandad Musulmana dijo: 'La actividad de Tariq [Ramadan] y de su hermano Hani es fiel a las ideas de la organización'. Los puntos de vista de Tariq Ramadan son claramente similares a aquéllos de la Hermandad Musulmana, aunque su manera de expresarlos sea occidental. [Su Islamismo en la guía occidental] fue formado por la educación que recibió en el hogar de los seguidores de Al-Bana, y por el hecho de que creció en Suiza y por eso habla francés nativo, conoce bien el inglés, y entiende la mentalidad y las maneras de Occidente".
Tariq Ramadan mantiene una relación cercana con el miembro de la Hermandad Musulmana Yousef Nida, quien fue amigo íntimo de su padre. En 1988, Nida fundó el Banco Al-Taqwa, el brazo financiero de la Hermandad Musulmana. El Jeque Yousef Al-Qaradhawi encabeza el comité jurisprudente del banco. Ahmad Huber, un suizo convertido al Islam que es fanático entusiasta de Hitler y del Ayatola Ruholla Khomeini, fue co-fundador del banco el cual tuvo que detener sus actividades después de que fue puesto en la lista americana de organizaciones que proporcionan ayuda y financiamiento al terrorismo islámico.
Doble discurso
"El doble discurso es la clave para entender a Tariq Ramadan". En su grabación de audio Islam y Occidente, Ramadan propone su estrategia de la siguiente manera: "Yo debo hablar de una cierta manera que sea apropiada para que el oído que me escuche... aunque fiel a las fuentes religiosas de autoridad". Él le aconseja a sus oyentes a que adopten una estrategia cautelosa en los medios de comunicación: "Nosotros debemos saber como hablarle a aquéllos que no comparten nuestra historia".
Guindy explica que mentir y engañar son características prominentes de la Hermandad Musulmana, y que el principio del taqiyya (esconder la verdadera creencia de uno por temor a que sea reprimida) lo cual es común entre los chi'a por razones históricas, se encuentra en todas las corrientes del Islam. "Hoy, este método [de doble discurso y taqiyya] es usado en el corazón de las democracias occidentales, no debido al temor a ser expuesto, sino para continuar el avance secreto [hacia metas definidas] sin preocupar a nadie. Así, un cuerpo como La Unión de Organizaciones Islámicas en Francia puede condenar severamente las operaciones suicidas, mientras el Concejo del Fatwa de la misma organización simultáneamente emite un fatwa claro que legitima estas operaciones".
La actitud de Ramadan hacia la violencia
"Cuando a Tariq Ramadan se le preguntó si tiene la voluntad de condenar el terrorismo, él responde, como los otros islamistas, 'Claro que condenamos el terrorismo... pero apoyamos la resistencia [muqawama]'. El 3 de octubre del 2001, Le Monde publicó un artículo de Tariq [Ramadan] el cual comienza condenando las operaciones del 11 de Septiembre del [2001], pero muy rápidamente empieza a lanzar dudas acerca del papel de bin Laden y Al-Qaeda [en los ataques]. Ramadan dice: 'Debemos hacer la verdadera pregunta: ¿Quién se beneficia de estas operaciones? Es inconcebible que cualquier causa "árabe o islámica" se beneficie de esto'. El artículo sigue para enfocarse en la idea de que el gobierno americano fue el que indudablemente se benefició, ya que [los ataques] proporcionaron a este 'un pretexto para revocar las libertades públicas en los Estados Unidos y emprender una guerra de Cruzadas contra el mundo islámico'. Ramadan llama luego a los musulmanes y no-musulmanes en el mundo a 'combatir juntos' (pero no especifica contra quien)".
En una entrevista en septiembre del 2004 con una revista italiana [Panorama], [Ramadan] habla sobre la muerte de un muchacho israelí de ocho años a manos de palestinos: "Este hecho en sí es digno de condena, pero es entendible bajo las circunstancias presentes... Se prohíbe atacar a civiles, pero la política gubernamental americana no les da ninguna otra opción a los palestinos.
Respecto al régimen islamista en Argelia, Ramadan "identifica varios errores en las acciones del Frente de Salvación [islámico], tales como su llamada a las mujeres a permanecer en el hogar y que no trabajen. Él se acelera en condenar la 'represión espantosa' de este grupo islamista, pero no dice una palabra sobre [las masacres] llevadas a cabo".
Según un informe del juez español Balthazar Garzon sobre las células terroristas locales y su involucramiento en los eventos del 11 de Septiembre, la policía española enfatizó que Ahmad Ibrahim, un alto miembro de Al-Qaeda capturado en España, tuvo contactos cercanos y regulares con Tariq Ramadan. Similarmente, cuando Ayman Al-Zawahiri visitó Ginebra en agosto de 1991, Ramadan coordinó una conferencia en su honor, asistido por el Jeque Omar Abd Al-Rahman (el "Jeque Ciego" quien fue declarado culpable de planificar el atentado a las torres gemelas en 1993).
Tariq Ramadan ha enfatizado que su abuelo Hassan Al-Bana de hecho llamó al jihad, pero explica que este jihad está limitado a "legitimar la defensa" o a "luchar contra la opresión." En su libro Tendencias en el Pensamiento Islámico Moderno, Tariq Ramadan escribe: "La Hermandad usa la violencia sólo como un último recurso, cuando están convencidos que la violencia ayudará a [observar] su fe y realizar su unidad." En otras palabras, explica Guindy, "la Hermandad Musulmana puede no estar llamando a la revolución armada, pero serán obligados a acudir a esta si otros no consideran sus exigencias".
La identidad civil contra la afiliación religiosa
Guindy argumenta que Tariq Ramadan pretende "ayudar a los musulmanes europeos en encontrar el equilibrio entre su identidad como musulmanes y su identidad como ciudadanos" Con este fin, publicó los libros Musulmanes y Secularismo (1994), Ser un Europeo Musulmán (1999), y Los Musulmanes y Occidente (2003).
A primera vista, parece ser que [Ramadan] está llamando en los musulmanes a darle igual peso a los términos "francés" y "musulmán", sin preocuparse de que pueden estar traicionando su identidad. Sin embargo, sus verdaderos puntos de vista son pronto revelados. En Musulmanes y Secularismo, él dice: "Estas dos afiliaciones [a la religión y a la patria] no son de una naturaleza idéntica o (de igual) grado. Siendo un musulmán significa que tienes una perspectiva completa en la vida... mientras que siendo francés significa que tu [meramente] tienes un papel como ciudadano..."
En su cinta de audio Nuestra Identidad en Lidiar con las Llamadas a Integrar y Participar [en la Vida Pública], clarifica que "el papel" conectado con la ciudadanía es meramente "una situación geográfica" que "no puede afectar la vida de [uno] y el significado que [uno] le asigna a ella".
En su cinta de audio Viviendo en Occidente, Ramadan dice: "Cuando yo vivo en un país o cuando soy ciudadano en este, respeto su constitución. Éste es un principio islámico". Sin embargo, él se apresura a calificar esta declaración enfatizando que sólo debe respetarse la constitución de un país y las leyes "mientras no haya ningún aspecto social, cultural, económico, o aspecto legal en ese país que contradiga algún principio islámico". Él aclara bien que "los musulmanes respetan las leyes del país sólo si estas no contradicen ningún principio islámico".
Integración en la sociedad anfitriona
En otra cinta de audio, Tariq Ramadan dice: "acordamos integrarnos en la sociedad anfitriona... Acepto las leyes, mientras no me obliguen a hacer algo que esté en contra de mi religión. Si usted debe convertirse en un mal musulmán para ser un buen francés, nosotros decimos que no... Debemos rechazar el [tipo de] integración que nos dice: 'Se musulmán, pero cambia tu vestimenta (por ejemplo el velo)'. En una carta al jeque de una mezquita en París, a quien él se dirigió burlonamente como un "musulmán ilustrado", Ramadan dijo: "Usted es tan abierto que se ha convertido en nada. Usted no está orgulloso de lo que es... Flexibilizarse en los principios es una señal de miedo y debilidad".
Ramadan llama en los musulmanes a no asimilarse en la cultura occidental sino crear "una cultura alternativa islámica europea que este limpia de toda influencia no-islámica... El Islam de Tariq [Ramadan] y de la Hermandad Musulmana transforma el enojo [de los musulmanes en Europa] que brota de ciertas razones culturales, en odio. Se supone que el odio está bien escondido, pero es extremadamente peligroso. Es más, en todos los lugares en Europa dónde uno encuentra [este tipo de] Islam entre la juventud musulmana, [uno también encuentra que] el Islam tradicional de los inmigrantes de la primera generación está colapsando... A [Ramadan] no le gusta este Islam tradicional, y llama a la gente joven a no emular a sus padres porque 'no practican el verdadero Islam'".
Educación
Según Tariq Ramadan, educar a los niños "de cierta manera que sea opuesta al Islam", tal como ocurre en las escuelas públicas en Occidente, es "agresión contra la personalidad islámica del niño." Ramadan llama en los alumnos a integrarse a la educación pública por razones prácticas, pero los anima a hacer preguntas, argumentar, y criticar cada vez que encuentran algo que es incompatible con el Islam en clases como biología, historia, o filosofía. Similarmente, [Ramadan] también "llama en las muchachas a abstenerse de la actividad deportiva si esta incluye cualquier exposición de sus cuerpos a los hombres".
La islamización de Europa
Guindy declara que la "meta de Tariq Ramadan es desarrollar gradualmente a Occidente hacia el ir aceptando cada vez más al Islam. En su cinta de audio Islam y Secularismo, él llama en los musulmanes a participar en la vida pública en todas las esferas... para que podamos cambiar las cosas hacia el [aceptar] una medida mayor del Islam". Advierte contra el hablar del "Islam político" y en su lugar predica un "Islam que todo lo abarca (Islam shumuli). Ramadan mantiene que "es importante para el musulmán actuar como un ciudadano para influir en su ambiente social, pero le está prohibido ser influenciado por el ambiente".
En otras palabras, "el objetivo de Ramadan es idéntico al de Al-Bana, pero él tiene en cuenta la realidad occidental democrática... Ahora se está enfocando en islamizar a la sociedad. Él [dice que] no busca convertir a Occidente en Dar al-Harb sino más bien en Dar Shahada. Esto es jugar con las palabras: la expresión shahada puede entenderse como da'wa [propagación del Islam] pero también puede entenderse como istishhad [martirio] a través del jihad...
"Tariq Ramadan está intentando esparcir y extender a la nación [musulmana] creando grupos pequeños por todas partes que se juntaran, y crecerán poco a poco, hasta que la expansión global [sea lograda]... Él busca persuadir a otros de que su camino es 'progresivo' meramente porque no es un terrorista". Sin embargo, dice Guindy, "peor que el hecho de que es fundamentalista es el hecho de que intenta forzar su punto de vista en los musulmanes, e incluso en la sociedad como un todo, [en semblanza de] un reformista. En 1993, tuvo éxito en detener la actuación de la obra de Voltaire Mahoma en Ginebra, denunciando que 'en las condiciones internacionales actuales, podría dañar al Islam'".
Racionalismo
El concepto de racionalismo de Tariq Ramadan es totalmente diferente del concepto de racionalismo tal como es concebido por los filósofos occidentales en la edad de la iluminación. Ramadan compara el racionalismo al ijtihad, lo cual significa buscar las respuestas que no son mencionadas claramente en el Corán o en el Sunna. Él considera al "pensamiento crítico" como "extremismo occidental". Ya que busca defender al Islam del acercamiento crítico, Ramadan dice que "dudar es parte de una historia específica". Es decir, dudar es parte de la herencia cristiana, pero no parte del Islam. Ramadan también sostiene que el racionalismo significa ahora "el camino racional a redescubrir la fe", y no debería ya entenderse como "pensamiento crítico" respecto a los asuntos de fe tal como los filósofos occidentales lo entendieron.
Secularismo
En enero del 2003, Ramadan dijo: "Acepto totalmente el secularismo". Sin embargo, un año después, se opuso furiosamente a la prohibición del velo en las escuelas públicas de Francia. Guindy explica que "[Ramadan] acepta el secularismo tal como él lo entiende. Es decir, [no acepta] el secularismo que separa la religión y la política. Tal como él declaró en su cinta de audio Sobre Secularismo, [él sólo acepta] el 'secularismo pluralista que trata a todas las religiones por igual... y nos permite regresar a nuestras fuentes con dedicación.' Es decir, Ramadan "ni siquiera examina los principios religiosos para aspectos que son compatibles con la sociedad secular. Al contrario, él intenta 'desarrollar' el secularismo de cierto modo que es compatible con su perspectiva fundamentalista".
Modernismo
Tariq Ramadan diferencia entre la modernidad [hadatha] y el modernismo [tahdithiya], la cual considera como "extremismo." En lugar del modernismo, propone el concepto de "modernidad islámica". El experto en asuntos islámicos franceses Jacques Jormier resumió la posición de Ramadan sobre el modernismo tal como sigue: No existe lugar alguno para la modernización del Islam, sino sólo para el Islamización de la modernidad." Tariq Ramadan habla sobre "progresividad islámica" por lo cual él quiere decir "aprovecharse de los adelantos tecnológicos al servicio del Islam. Es decir, uno puede ser extremista y al mismo tiempo puede usar la última tecnología - especialmente si la tecnología está siendo usada para atacar a la modernidad".
Ramadan también rechaza de pleno la posibilidad de que Turquía y Túnez pudieran ser modelos para el Islam moderno, argumentando que "la legislación llevada a cabo en estos países fue creada durante el "período colonialista. Él desatiende el hecho de que Turquía nunca fue una colonia, y que el secularismo fue establecido por los gobiernos de estos países después de la independencia y no durante la era imperialista.
Castigo corporal
"Tariq Ramadan condena 'la mala conducta hacia la esposa de uno' pero no condena el golpear a la [esposa] porque está permitido por el Corán". En un debate en la televisión francesa en noviembre del 2003 en el que participó con el Ministro del Interior francés Nicolás Sarkozy, Ramadan fue preguntado por un artículo escrito por su hermano Hani que justificaba el apedrear a las mujeres. Ramadan no dijo si objetaba o no esta clase de castigo, pero dijo que él personalmente "llamó a una moratoria en la aplicación del castigo". Él agregó que duda objetar este castigo porque no quiere perder credibilidad entre los islamistas". [10]
Conversión
Tariq Ramadan está a favor de imponer las leyes basadas en el shari'a en los países musulmanes. En su punto de vista, "cualquiera que se oponga al shari'a el cual está basado en textos claros, se desvía de la religión y no es ya más un musulmán".
"Él reprende al gobierno egipcio por no respetar los derechos humanos, pero está opuesto a la [noción de que] este derecho puede incluir la libertad para un musulmán de poder convertirse a otra religión". Al mismo tiempo, Ramadan a veces dice: "Mi punto de vista - el cual es una forma minoritaria de ver - es que [los musulmanes] tiene derecho a convertirse, mientras no dañen a nadie alrededor de él".
Palestina y los judíos
"Tariq [Ramadan] no mostró interés en el asunto de Palestina, hasta que Hamas, la cual es una rama de la Hermandad Musulmana, se hizo más prominente. En ese punto, sus opiniones contra Arafat y el proceso de paz se hicieron similares a aquéllas del Hamas. En un libro compartió la autoría con Alain Gresh [editor del diario francés Le Monde Diplomatique], dijo que la destrucción del Estado de Israel es hoy imposible en términos prácticos, así que él apoya la idea de 'un estado' para ambos judíos y árabes... como un paso en el camino a una solución".
"Respecto a los judíos, Ramadan se adhiere a la posición del Corán, manteniendo que los judíos que estén dispuestos a formar una alianza con los musulmanes son dhimmis..."
El enfrentamiento de las civilizaciones
"Islam será en el futuro una de las fortalezas en la batalla contra la hegemonía occidental". Sin embargo, "Ramadan rechaza la posibilidad de que Occidente y el resto del mundo sean amenazados por el 'despertar islámico' que él está instando". En su cinta de audio Islam y Occidente, predice que "la creciente desintegración en Occidente llevará al triunfo del Islam". Él también subraya la influencia islámica en la cultura occidental y el hecho que los pensadores musulmanes en Andalucía participaron en crear parte de la herencia presente de Europa. Sin embargo, "es duro para él aceptar la noción de que la asimilación e integración no ocurrieron en sólo una dirección [e.d. que el Islam también fue influenciado por Occidente]".
Islamofobia
Tariq Ramadan a menudo acusa a sus críticos de "islamofobia." Este término se extendió seguido al fatwa de pena de muerte decretado en 1989 contra Salman Rushdie, cuando la atención pública fue llevada de la amenaza a la libertad de expresión al asunto del "racismo y hostilidad contra el Islam." En 1997, el Parlamento Islámico de G. Bretaña publicó un documento que definió la islamofobia como cualquier ataque al Profeta y al Corán y cualquier crítica a las bases morales y sociales del Islam - qué incluyen el tratamiento a las mujeres, el castigo corporal, y similares.
Mientras la ley francesa prohíba las declaraciones racistas y declaraciones que inciten en contra de grupos específicos, esta no trata los ataques a una religión como un crimen. Tariq Ramadan y los otros islamistas están intentando argumentar que "criticar al Islam es igual que incitar contra los musulmanes", y así ellos justifican demandando a aquéllos que son críticos al Islam.
Cuando un comité de expertos en la Universidad de Friburgo rechazó su disertación doctoral en 1998, Ramadan denuncio que había sido víctima de islamofobia. [11] Siguiendo a su debate en televisión del 2003 con el Ministro del Interior francés Sarkozy, cuando un MP suizo preguntó si una figura tan polémica como Ramadan debería estar disertando en la Universidad de Friburgo, Ramadan hizo surgir de nuevo el asunto de la islamofobia e instó a los estudiantes a que firmaran una petición apoyándolo. Así, "a través de los años Ramadan ha podido evadir algunas críticas presentándose a si mismo como una víctima".

Marcos Valcárcel López dijo...

Un traballo tan denso e documentado como o que nos remata de ofrecer Anónimo PC non debera quedar reducido aos espazos deste blog: animo ó seu autor a publicalo nalgún xornal galego ou revista deste país, que seguro que o acollerá de bo grafo.

Anónimo dijo...

Non, ho, o traballo non é meu. Xa dixen que non tiña suficientes elementos de xuízo. Está publicado na rede. Se quere póñolle a súa ficha. Eu só copiei e colei un cacho.

Anónimo dijo...

Ben. Moi ben. Alégrome das sempre documentadas leccións de Político cultural, sacadas de
Tariq Ramadan - Reformista o islamista?, Por A. Dankowitz, libles en:
http://memri.org/bin/espanol/articulos.cgi?Page=archives&Area=ia&ID=IA26606

A este respecto, é interesante oír a palabra de Tariq cando o expulsan de USA, recollida por Saenz de Ugarte en

http://www.guerraeterna.com/archives/2004/12/la_palabra_de_t.html

E o debate posterior

http://www.guerraeterna.com/archives/2005/09/el_blog_de_aris.html

Aínda que para unha simple visión encilopédica, por exemplo,
http://en.wikipedia.org/wiki/Tariq_Ramadan
(Na versión inglesa di que os seus fillos estudan na escola de Cat Stevens, na española non, ou sexa que debe ser máis completa a primeira).

E se lle qeuremos botar unha ollada´ao que di il directametne, na súa web.

http://www.tariqramadan.com/welcome.php3

Creo que fun algo cauto no entusiasmo. dicía:

"Desde logo un discurso suxestivo... pero é posible logralo? Eis o problema".

e
"Se cadra é así. E por se fose certa esta cousa tan bonita, creo que occidente debería apoiar estas visións reformistas do Islam, porque Tariq é un deles e, creo, tamén un de nós. El calquera caso a política de só pau dos últimos anos, moito resultado non leva dado en favor dun mundo máis seguro e en paz. Hai que explorar outras vías. Pero rápido, rápido".

Explorar outras vías sen condenar de partida. Entusiamo? Non mo pareceu. Se cadra enganeime. Pero é positivo falar deste tema.
Non todo vai ser rabiza, abeaca e tamón.

Anónimo dijo...

Non, ho, eu non pretendo dar leccións a ninguén, eu non, e menos neste asunto. E xa dixen que o texto non era meu e me ofrecín a poñer a ficha.

O bo que ten Google, como o señor Monxardín acaba de amosan, é que atopamos moitas referencias. Despois hai que lelas e asimilalas. Pero non chegan por si soas.

Hai que ler e asimilar moitos outros libros -si, libros de papel- para informarse máis e ter unha visión moito máis completa.

Eu non fixen iso, tal como recoñecín desde o primeiro momeneto, e non sei se Monxardín o fixo.

Tan só propuxen unha cautela metolóxica: ser máis precavido ante o que sabemos pouco.

Ese é o meu caso. O de Monxardín non sei, pero como dixo que até hai uns días non sabía quen era Tariq Ramadán, coido que é lexítimo tender a pensar que lle pasa como a maioría de nós. Porque nunha semana ou dúas, un non se pode convertir en experto.

Por iso reitero: cautela, non botar as campás a voar, porque podemos levar un bo carallazo.

Un saúdo.

Anónimo dijo...

Por favor, nin dixen nin insinuei que vostede quería dar leccións -cousa que por outra parte, podería facer con suma facilidade e elevado nivel, porén, o discurso de Tariq, é suxestivo, non lle parece?
Teño unha prevención atávica contra o mundo musulmán, é certo, e como dixen hai uns días non coñecía a este home. Ademais, non me penso converter en polítólogo, aínda que me atraia a capacidade de escoitar, ler e opinar.
E que quere que lle diga, pareceume interesante a liña que propugnaba. ¿Embaucador? Se cadra, pero pode tamén que non. Evidentemetne non é un laico, e cada pouco falaba dos "sabios islámicos" incluíndose, como orientadores do pobo musulman. Eu que sei. Se cadra estes veno así. Ou se cadra hai que esquecer o mundo global, co que supón de esquecernos dos dereitos humanos, etc. No que todos estamos de acordo é que é todo moi complicado.
Give peace a chance, dicía o Lennon.Moitas saídas non están deixando, ademais occidente esqueceu aos laicistas do mundo musulmán...que andan de campa caída. Ao final imos volver a Gadaffi. Anda mal o conto.

Anónimo dijo...

Señor Monxardín:

Vostede si que podería, e pode, dar leccións de bastantes cousas. Non en balde, admiro a súa valentía e independencia de criterio amosada en boa parte das súas columnas.

O único que me limitei a comentar é que, neste artigo seu en concreto, fixo gala dun entusiasmo que eu calificaría de inxenuo e benintencionado. Nada máis. É unha opinión.

E como simple contraste co seu entusiasmo, colguei algúns fragmentos para que os blogueiros puiden constatar que todo o que se refire a Tariq Ramadán está envolto na polémica, e que semella que non é cera todo o que arde.

En efecto, concordo con vostede en que todo é moi complicado. Por iso estimo que debemos tratar de non simplificar as cousas. Comezando por min, por suposto, e continuando por vostede.

Sine ira et estudio. Este é o lema que deberiamos aplicar antes de lanzarmos -nun sentido ou noutro- as campás ao vó.

Porque, parécemo, facer as cousas "depresa, depresa", tanto no plano individual como colectivo, adoita levar a máis frustración.

A súa segunda contestación, máis dubitativa e menos entusiasta, paréceme que vai por ese camiño de "quieto parao, imos ver!".

Polo demais, rógolle que, como tónica xeral, sega co seu entusiasmo. Eu tan só lle quixen poñer, neste caso concreto, unhas pingas de sá excepticismo ao mesmo e un ramiño de perixel irónico. E se mo permite, haberei facer o mesmo noutra ocasión. Porque, á fin é á postre, a única unanimidade é a dos cemiterios.

Un cordial saúdo.